La historia de esta joven cofradía de San Pedro comenzó por vez primera a funcionar como tal, al acabar las procesiones de Semana Santa del año 1934. Es cuando se forma en nuestra ciudad la Junta Organizadora de los Gremios de Semana Santa. Al amparo de dicha junta, nace el nuevo gremio de San Pedro Apóstol, que proyecta sacar en procesión la imagen del apóstol, en talla, que existía en la parroquia del Niño Jesús. Por circunstancias que desconocemos, el gremio de San Pedro no llegó a participar en las Procesiones de Semana Santa. Aunque en la segunda mitad del siglo XVII, existía una cofradía de San Pedro, a la que solo podían pertenecer los sacerdotes de la villa, siendo su mayordomo el sacerdote más antiguo.

En el año 1982, cuando un grupo reducido de jóvenes procesionistas, alentados por simpatizantes de San Pedro, dan los primeros pasos para la creación definitiva de la Cofradía. En el mes de mayo de este año, se autoriza por parte de D. Domingo Garre, párroco de la Purísima y por parte del presidente del Cabildo, D. Juan Jesús Azorín Pérez, la creación de la cofradía de San Pedro Apóstol. Hubieron de pasar dos años más, y en la tarde del Jueves Santo, 19 de abril de 1984, desfila la nueva cofradía. Sus componentes son todos jóvenes, que visten las antiguas túnicas de la cofradía del Ecce Homo, siendo el trono el antiguo de la Virgen de los Dolores, cedido por esta cofradía. A la entrada de la Basílica y debido al gran peso de la imagen, ésta se desprendió, sufriendo varios desperfectos que tuvieron que ser reparados durante toda la noche por Mariano Puche y Emilio Pascual Molina.

En 1985, se estrenan 20 trajes nuevos: capa y fajín en raso rojo y túnica y capucha en raso azul. Asímismo, sale el nuevo trono tallado en madera en la empresa Agustín Díaz, por el tallista Manuel García Marco.En 1988, se estrenan 35 cetros en madera, realizados en la empresa «Torneados Muñoz» y se estrena un carro nato.

En 1989, se estrenan 35 capuchas en raso negro para la procesión del Santo Entierro. Como novedad se coloca un nuevo gallo en el trono, donado por unos simpatizantes de la cofradía.

Texto extraído de: «Semana Santa en Yecla – Historia y Arte»

de Luis Azorín Soriano, José M. Martí Pérez, Fco. Javier Delicado Martínez.