El domingo 15 de marzo, cuando apenas han transcurrido cuarenta y ocho horas del último Pleno Extraordinario celebrado por este Cabildo en el que se acordaba suspender todos los actos y cultos organizados por este Cabildo y por las distintas Cofradías y Hermandades hasta el día 31 de marzo y tras el Decreto de Estado de Alarma (Real Decreto 463/2020) del 14 de marzo, por el que se declara el estado de alarma en todo el territorio nacional para la gestión de la situación de crisis sanitario ocasionada por el Covid-19, y ante la imposibilidad de realizar reunión alguna y así cumplir con las recomendaciones sanitarias, y con las medidas mucho más duras de confinamiento de la población y que podrían prorrogarse más allá del 31 de marzo, el Sr. Presidente del Cabildo, junto a su Junta Permanente, deciden realizar otro pleno extraordinario utilizando los medios telemáticos, con el único punto del orden del día, la suspensión de las procesiones de Semana Santa. Una vez realizada la consulta con todos los presidentes, se decide la suspensión de inmediato de las procesiones de Semana Santa 2020. Esta dolorosa decisión es tomada consensuada por todas las cofradías y hermandades, presidente, junta permanente, consiliario y el Sr. Alcalde. Este acuerdo de suspender las procesiones es trasladado a la opinión pública a través de los medios de comunicación.